Laura

“Siempre a la verita tuya”: Puede que os recuerde a una canción que cantaba Lola Flores, a mí me recuerda a una canción que me cantaba mi abuela cuando era pequeña mientras yo le ayudaba a hacer la comida.

Ella, con su delantal y su vestido de flores pequeñitas que suelen llevar las abuelas para estar por casa, me cogía de la mano y con todo su ímpetu me cantaba aquella canción mientras me miraba a los ojos.

Se fue demasiado pronto y yo, diez años después, decidí tatuarme aquella frase para llevar a mi abuela siempre conmigo. Fue mi primer tatuaje y me lo hice en las costillas para que nadie pudiera verlo, para que fuera algo entre ella y yo, como en los viejos tiempos.