Patri

Para mí, el chalet donde vivo, más concretamente el jardín y los alrededores, el pinar, son mi patrimonio, en esta casa, junto a mi hermana, mis padres, y personas que no están conmigo a día de hoy han hecho cada uno de los recuerdos y vivencias en esta estructura, con mi hermana he jugado, he imaginado historias, he reído, he llorado, y en general, he ido creciendo como persona a la par que la naturaleza hacía crecer la vegetación del césped y de mi entorno, por lo que se podría decir, que los 21 años de mi vida están en cada pared, cada hormiga, cada muñeco de nieve, cada conejo que salía corriendo al oír a unos niños intentando cogerles, cada discusión con la llegada de la juventud o la alegría cada navidad, cada cumpleaños.

Actualmente el chalet está en venta, y sé que cuando nos mudemos, dejaré atrás no una casa, ni un jardín ni un pinar, si no vivencias que recordaré dentro de mí, o al hablar con familiares o amigos, pero de algo que no me olvidaré nunca es de este chalet, mi primer hogar.