El Reloj

Este reloj es un objeto muy importante para mí, ya no por su valor económico sino por el valor sentimental que éste tiene para mí. Me lo regaló un primo, con el que he compartido experiencias muy bonitas durante mi infancia y su corta vida, ya que falleció con 24 años.

Era una persona agradable, simpática, muy amigo de sus amigos y sobre todo, muy familiar. Teníamos una relación más que de primos, de hermanos, pasábamos mucho tiempo juntos, me iba a recoger al colegio, me ayudaba a hacer los deberes y en cuanto tenía tiempo libre siempre se acercaba a mi casa para pasar tiempo conmigo. Me lo regaló por mi comunión, recuerdo ese día como si fuese ayer.

Llamó al timbre de mi casa y me dijo “Tengo un regalito para tí”, bajé las escaleras, abrí el regalo, era un reloj con la correa rosa, mi color favorito, me encantó. Quería ponérmelo desde ese día, pero me dijeron que lo estrenaría el día de mi comunión.

Ese día fue inolvidable, lo pasamos muy bien, estábamos todos reunidos y juntos Si lo perdiera, estoy segura que tendría sentimientos de disgusto, culpa, decepción, entre otros, ya fue un regalo que me hizo con mucho orgullo y alegría. La persona que me lo regaló, ha sido una persona fundamental e imprescindible en mi vida y es el único objeto que guardo y conservo desde que falleció, también es el único regalo que tengo de él, por lo tanto, a parte de fotos, el reloj es otra de las cosas que me sirven para recordarlo y sentirlo cerca.

Pocas veces me lo he puesto por miedo a perderlo. Nunca he pensado qué haría con él en el futuro, pero lo que sí tengo claro es que va a ser un objeto que voy a guardar siempre. Si algún día tuviera algún hijo, y le gustase dicho reloj, se lo regalaría, pero me gustaría que lo cuidara y conservara tanto como lo hago yo, y que para él/ella no fuese un simple reloj, sino que tuviera un significado igual que lo tiene para mí.

Por Marta.