Una gran familia

Todo comenzó cuando un grupo de chavales se apuntaron al mismo equipo de fútbol sala en el colegio, con el paso de las primeras semanas nos íbamos conociendo haciendo lo que mas queríamos, jugar, durante los primeros años al ser todos pequeños eran risas y enfados por cualquier e insignificante cosa ya que no comprendíamos el deporte, solo que nos gustaba jugar. Con el paso del tiempo había chicos que se iban y otros que venían, pero desde el primer año había un grupo de 5 chavales que llevábamos desde el primer año y nos conocíamos a la perfección, teníamos una gran amistad y respeto entre nosotros. En los primeros años de secundaria empezamos a jugar la liga regional de Castilla y León, algo nuevo ya que era la primera vez que competíamos contra equipos de fuera de Valladolid, éramos un grupo de 15 jugadores y 3 entrenadores que desde el primer día empezamos a jugar juntos por el mismo objetivo, intentar quedar lo mejor posible en la clasificación pero con un único requisito, disfrutar del fútbol sala y competir hasta el final. Ese año con el sacrificio por parte de todos conseguimos transformar un grupo de amigos que querían jugar al fútbol sala en una pequeña familia sin darnos cuenta, solo con trabajo y confianza en los demás, se puede conseguir algo tan bonito como esto.