Cautivo del tiempo
El cautivo del tiempo no es un simple reloj, es recuerdos, historias, secretos, familia que me acompañan ahora y para toda la vida. Siendo una niña, mi abuelo me enseño el cautivo del tiempo, su historia, un hombre que vivía preocupado por el paso del tiempo sin apreciar realmente lo bonito del día a día, valorando las cosas más pequeñas. Cuando se quiso dar cuenta ya era demasiado tarde para hacer lo que realmente quería hacer, se preocupó tanto por el tiempo que se olvidó de vivir, paso el tiempo y su vida se había limitado a preocupaciones respecto al tiempo. Desde entonces, cuando me preocupaba algo iba a su lado, le daba la mano y se lo contaba de forma que las preocupaciones se esfumaban. A medida que iba creciendo seguía yendo a casa de mis abuelos para solucionar mis preocupaciones. Hace ya 7 años que una flor lo acompaña, esa flor se la dio mi abuelo a mi abuela días antes de que su tiempo se acabara.