Mi legado
A simple vista parece un balón de fútbol normal y corriente, pero para mí es mucho más. Se trata del balón del mundial de 2010 en el que ganó España. Lo he escogido porque tiene un gran valor sentimental para mí, más allá del simple hecho de que ganase España el mundial, es importante para mí por la gente con la que compartí ese momento y por los recuerdos que me trae. Recuerdo ver los partidos del mundial en casa de mi abuelo con 6 o 7 años, nos juntábamos toda la familia para pasar un buen rato y aprovechar para ponernos al día, y de ahí nació mi pasión por el fútbol. Hasta ahora el balón había estado guardado en un armario de mi cuarto y no le daba ninguna importancia, pero hace unos meses mi abuelo falleció y pasó a tener un valor especial para mí. A los dos nos gustaba mucho el fútbol y todas las semanas hablábamos de los partidos de nuestros equipos favoritos y se nos pasaban las horas sin darnos cuenta. Ahora cada vez que veo el balón me vienen todos esos buenos momentos a la mente y por eso se ha convertido en el objeto más valioso de mi patrimonio personal.